U.S. Rapprochement: A Good Climate for Bolivia

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Hay un buen clima para que Bolivia y EEUU se acerquen

jOSÉ MIGUEL INSULZA, secretario general de la OEA, recibió a La Razón ayer, en La Paz, antes de asistir al acto de promulgación de la CPE boliviana.

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Opiniones sobre esta Nota

El Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA) llegó ayer muy temprano a una La Paz fría y lluviosa. Con una bronquitis “que acarreo por el mundo”, pero con buen humor, José Miguel Insulza dialogó con La Razón momentos antes de dirigirse a El Alto, donde participó del acto de promulgación de la Constitución boliviana. No estaba previsto el viaje, explicó; pero “el proceso ha sido largo y como OEA hemos participado en cada una de las instancias: las elecciones, los referendos, los diálogos… creo que nos hemos ganado el derecho de estar en la firma de la Constitución”.

Sobre la nueva CPE, “no me toca pronunciarme”, advirtió antes de seguir con la entrevista. “La ha aprobado por sólida mayoría el pueblo boliviano y por lo tanto será la que se tendrá que aplicar”.

¿Cómo se observa desde fuera el proceso que vive Bolivia?

Como un proceso necesario. En general, lo que ha sucedido ha sido visto por los países de casi todo el mundo como algo que debía tener lugar. La composición étnica social de Bolivia requiere de una transformación muy profunda, por tanto, creo que se tiene, pese a los obstáculos y los problemas presentados, una actitud comprensiva.

Y sin embargo se prevén conflictos, ¿por dónde cree que debe transitar la posibilidad de un entendimiento?

Desde el punto de vista de la OEA se aprecia el que Bolivia tuvo la deferencia de ir a informarnos con bastante frecuencia, lo cual ha sido muy favorable, pues no se ha tenido que venir a preguntar qué pasa. Y la idea predominante es que el diálogo es posible y que las cosas van saliendo adelante pese a las peleas, a las cosas a veces terribles que se dicen y más allá de los incidentes lamentables como los que pasaron en Pando. Lo que se tiene claro es que el pueblo boliviano lo que quiere es el diálogo, la paz, y en la medida en que sus autoridades vayan asegurando esto, van a tener legitimidad para realizar las reformas.

Está muy presente el respaldo suyo al texto que emergió de la Asamblea Constituyente, el que posteriormente fue modificado en más de 100 artículos.

Bueno, el juicio que di fue de carácter general. Naturalmente, hay cosas que pueden estar bien o mal, cosas discutibles. Lo que dije es que, a primera vista, no encontraba nada que transgrediera las normas básicas de la democracia, que vaya en contra de la Carta Interamericana al respecto; no dije que es la Constitución que yo dictaría, por Dios. Lo que hice fue dar un juicio desde el punto de vista de los instrumentos que maneja la institución que represento. Luego surgieron dificultades que me fueron planteadas con mucha claridad por muchos especialistas, como el tema de la dualidad de la justicia, pero que fueron razonablemente bien corregidas en el debate.

¿Cómo evalúa la participación de la OEA en el caso de Pando?

Lo de Pando fue un golpe fuerte y sorpresivo para muchos. Estábamos acostumbrados a saber de conflictos difíciles en Bolivia; pero donde de manera casi casual no había muertos. De pronto se produce una matanza en circunstancias como las que se dieron. No me puedo pronunciar sobre los hechos mismos por tres razones: uno, porque el caso está ante la justicia; dos, hay un informe de Unasur que no voy a comentar, y tres, los ministros bolivianos pusieron el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y no puedo descartar que en su próxima sesión adopte una medida para investigar los hechos, que es lo que se le pidió y que no sería contrario a lo que hizo Unasur.

¿Unasur desplazó a la OEA?

Ellos nombraron una comisión ad hoc y en el caso nuestro tenemos la comisión que está en la Carta y la Corte en la Convención Interamericana de Derechos Humanos, son organismos con imperio legal para los países y que deben seguir los procedimientos. Ni en circunstancias especiales podría yo instruir que la comisión vaya a estudiar un caso. Unasur puede hacerlo. Y no, no nos sentimos desplazados.

¿Es confiable un informe que da por muertas a personas que no lo estaban?

Diría que esto tiene un efecto publicitario negativo porque habrá quien piense que otras cosas tampoco ocurrieron. No creo que hubiese mala fe ni ocultamiento.

El ex presidente Carlos Mesa dijo que la comunidad internacional es demasiado benévola con Evo Morales por su condición de presidente indígena. ¿Comparte esta idea?

Yo no cuestiono que la llegada del presidente indígena en un país con mayorías indígenas es un fenómeno que todo el mundo ve como positivo. Cuando el presidente Morales fue elegido se dijo algo parecido a lo escuchado sobre Barack Obama: “Si no pasaba ahora iba a pasar alguna vez de todas maneras”, con la diferencia de que el presidente Obama representa a una minoría importante de EEUU y el presidente Morales, a una mayoría de la sociedad boliviana. Esto ha generado mucha simpatía; pero con el tiempo también se ha ido valorando la voluntad de cambio y lo que se ve como un genuino deseo de llegar a acuerdos, de buscar el diálogo, de no salirse de los marcos del juego democrático, lo cual hace que las fallas que pudiera haber sean miradas de manera benévola. Morales pudo haber impuesto la Constitución y no lo hizo, pudo llamar al referéndum sin discutir y no lo hizo; convocó a los prefectos, no se llegó a acuerdos y buscó otra instancia en el Congreso, y llamó a otro referéndum. Todo ello hizo que el proceso cuente con simpatía probablemente mayor.

La oposición mencionaría, tal vez, los cercos al Congreso…

Estas cosas fueron criticadas, no pasaron desapercibidas. Pero vino luego la disposición al diálogo. El balance general es positivo y no hablo por mí; los embajadores, en la OEA, incluso de EEUU, dirán algo similar.

¿Será la V Cumbre de las Américas el escenario para que Barack Obama ponga en práctica los anuncios sobre la región?

Lo que se espera es un buen diálogo. Hay una frase del presidente Obama sobre el mundo que rescato y que habla de su voluntad de gobernar “con ustedes”. Y eso buscarán los latinoamericanos y caribeños en esta cumbre. Por la crisis, los problemas en Irak, Afganistán, Medio Oriente, no se espera que Obama y la secretaria Clinton lleguen con una gran política; pero se quieren dos cosas: una muestra de la buena voluntad, un clima distinto, de predisposición al diálogo, y otra, algunas resoluciones sobre temas clave. Para la OEA, como para los países, el tema del cambio climático es importante; pero lo más duro es la crisis económica. Por ejemplo, es necesario asegurar flujos financieros; los países que desarrollan planes contra la pobreza no tienen los recursos y los organismos internacionales tendrán que proporcionárselos.

Habla usted de posibilidades de entendimiento entre Bolivia y EEUU, ¿advierte señales?

La misma simpatía que mencionamos antes se trasunta en muchas conversaciones que se sostiene con parlamentarios estadounidenses. Ahora, creo que para que haya acercamiento es necesario bajar la retórica de ambos lados, no decirse más cosas sino tratar de construir puentes e ir adelante. Diría incluso que volver a temas como el ATPDEA no está descartado, pero es necesaria una relación armoniosa, sin tantas recriminaciones.

“ Diría incluso que volver a temas como el ATPDEA no está descartado, pero es necesaria una relación armoniosa, sin tantas recriminaciones. ”

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