Hispanics, Harry Reid and the Democratic Senate

<--

Los hispanos, Harry Reid y el Senado demócrata

Los hispanos de Nevada consolidaron la victoria del senador Harry Reid en las legislativas del pasado martes. La victoria confirmaba también que el partido demócrata conservaría la mayoría en el Senado, después de haber perdido el control de la Cámara de Representantes.

Hasta un 90 por ciento de los votantes latinos respaldaron al demócrata según Latino Decisions. Otra encuesta de MSNBC, realizada a pie de urna, sitúa el apoyo en un 68 por ciento.

“La ola republicana ha encontrado un muro en el oeste”, tal y como explicaba Gerry Segura, responsable de la encuesta de Latino Decisions.

La incidencia del debate sobre inmigración en estados como Arizona, Nevada o California estaba en la mente de los votantes. Para Clarissa Martínez, directora estratégica del Consejo Nacional de La Raza, ayer quedó claro que “la mayoría de los hispanos salieron a votar para pedir respeto”.

Varias organizaciones hispanas coinciden en que los hispanos han reafirmado su importancia como candidatos y como votantes dentro del escenario político estadounidense. Ayudaron al demócrata Harry Reid a renovar su cargo en el Senado, pero también empujaron el ascenso de los republicanos Marco Rubio, el primer senador de Florida descendiente de cubanos, y Susana Martínez, la primera gobernadora hispana de Nuevo México.

En California los hispanos consolidaron el bloqueo a los republicanos. Todos los datos apuntan a que en este estado el electorado hispano ha contribuido a la victoria demócrata tanto para el gobernador Jerry Brown (con un 63 por ciento del voto hispano) como la senadora Barbara Boxer. En las elecciones más ajustadas, el voto hispano se corresponde además con el margen de diferencia por el que ha ganado cada candidato.

Las encuestas apuntan a que la importante afluencia de los hispanos a las urnas tiene mucho que ver con el debate migratorio.

Hasta un 63 por ciento de los hispanos encuestados en ocho estados clave declararon que acudían a las urnas por la inmigración. Asimismo, la mayoría de los hispanos -un 47 por ciento- votaron en apoyo a su comunidad, frente a un 31 por ciento y un 12 por ciento que apoyaron a demócratas y republicanos respectivamente.

Los diferentes resultados obtenidos entre la comunidad hispana obligarán al partido republicano a reconsiderar su postura acerca de la reforma migratoria. La mayoría de los republicanos se oponen a un nuevo sistema, pero muchos hispanos han ayudado a encumbrar a candidatos de ese partido, como Marco Rubio en Florida.

“El electorado hispano, especialmente en Florida, está muy diversificado por nacionalidades”, apuntaba Segura. El responsable del estudio insiste en que Rubio permite hablar de una victoria de la comunidad cubana y republicana de Florida, pero no de todos los hispanos de ese estado.

Tampoco se puede generalizar con los votantes hispanos de todo el país. En el caso de Arizona, han dado la espalda a Jan Brewer después de una campaña muy agresiva. Sólo un 14 por ciento de los votantes hispanos apoyaron a la gobernadora republicana, según las encuestas de Latino Decisions.

“No hay ninguna duda que la ley SB1070 y los incesantes ataques anti inmigrantes de Jan Brewer fueron un factor importante a la hora de votar para los hispanos”, afirma Ben Monterroso, director ejecutivo de la organización Mi Familia Vota. “Los políticos deberían tomar nota: esta estrategia no funciona. Los hispanos están creciendo como grupo de votantes. Si basas una campaña en separar al electorado en función de lo que piensan sobre inmigración, no sólo es anti democrático, es una locura”.

La organización Mi Familia Vota trabajó durante los últimos meses para registrar al mayor número de votantes hispanos posibles. El resultado: 26.000 se sumaron a la lista de votantes permanentes, un aumento del 30 por ciento con respecto a sólo un año antes. La coalición de organizaciones como Mi Familia Vota logró contactar con 230.000 votantes latinos denominados “infrecuentes”.

“Ahora sabemos el papel que pueden jugar los hispanos en próximas elecciones a nivel estatal en Arizona”, afirma Francisco Heredia, director de Mi Familia vota en Arizona. “Si seguimos invirtiendo en programas que aumenten la participación de los hispanos, no hay duda que la voz de estos votantes será escuchada cada vez más en 2012 y los siguientes comicios”.

El voto hispano decidió candidaturas puntuales para cada uno de los partidos en Arizona, Nuevo México, Florida o California. Pero Frank Sherry, director de America’s Voice va más lejos: “los hispanos salvaron el Senado para los demócratas”.

About this publication