Ron Paul Takes CPAC

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Ron Paul toma el CPAC

El veterano congresista tejano Ron Paul se convirtió en la estrella de la convención anual del Conservative Action Political Committee (CPAC), una influyente coalición que organiza el evento más importante del movimiento conservador estadounidense. En esta edición, la número 38, el CPAC consiguió reunir a más de 10.000 activistas conservadores, la mayoría jóvenes, en el Marriott Wardman de Washington.

Paul, un verdadero icono del movimiento libertario estadounidense, fue el orador que despertó mayor entusiasmo, pero también mayor rechazo, de todo el evento, de tres días de duración. Su intervención fue interrumpida en numerosas ocasiones por la ovación y vítores de centenares de jóvenes, que conseguían acallar los abucheos de los detractores de este político inconformista.

En su discurso, Paul abordó sus temas favoritos de siempre: la supresión de la Reserva Federal, la defensa de las libertades civiles frente a la intrusión del Estado, el despilfarro del gobierno federal, y lo nefasto del imperialismo norteamericano. “¿Para que queremos tener 900 bases en el extranjero?”, se preguntó, antes de citar a Eisenhower para alertar de los peligros del “complejo militar-industrial”.

Es sobre todo por su posición aislacionista en política exterior y de seguridad que Paul despierta el repudio, cuando no el menosprecio, del “establishment” conservador. Sus duras críticas a la Patriot Act debieron doler a personajes como Dick Cheney y Donald Rumsfeld, quienes, por cierto, al subir al estrado recibieron silbidos por parte de algunos de los seguidores de Paul.

En estos asuntos, su posición se encuentra tan alejada de la mayoritaria en su partido que todos los expertos coinciden en negarle opción alguna de hacerse con la nominación republicana si decidiera presentarse en las primarias, como hizo en 2008. Ahora bien, es evidente que cuenta con la adhesión entusiasta de miles de jóvenes.

Al igual que el año pasado, Paul se impuso en un simulacro de primarias entre los asistentes a la convención, lo que demuestra que sus seguidores están muy bien organizados. En concreto, recibió un 30% de los votos, sólo seguido de cerca por Mitt Romney, con un 23%. El resto de los favoritos, como Sarah Palin, New Gingrich, Mike Huckabee o Tim Pawlenty no obtuvieron más del 5% de los votos.

Quizás aún más significativo que estos resultados es el hecho de que un 43% de los activistas que participaron en el simulacro electoral respondieron en un sondeo adjunto que no están satisfechos con el grupo de presuntos aspirantes. De hecho, no deja de ser revelador que el tercero, con un 6% de los votos, fuera Chris Christie, el carismático gobernador de Nueva Jersey que ha repetido decenas de veces que en su horizonte político no figura la Casa Blanca.

Si finalmente Paul no se presenta, habrá que ver qué candidato es capaz de canalizar la energía -y los millones en contribuciones- de la juventud libertaria estadounidense. En las generales del 2008, Obama recibió una parte del voto libertario gracias a su oposición a la guerra de Irak. Sin embargo, con la política doméstica situada en el centro del debate, esta vez aquellos libertarios seguramente volverán al redil republicano.