The Organization of American States in Bolivia

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La OEA en Bolivia

De la habilidad de los participantes dependerá el apoyo a la demanda marítima del país

La Razón / La Paz

00:08 / 03 de junio de 2012

Hoy se inaugura en Tiquipaya la 42° Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA). Treinta y tres años después de la primera vez que el organismo continental sesionara en Bolivia, la demanda boliviana de acceso soberano al mar sigue presente en la agenda, pero además se tratará otra preocupación del país: la seguridad y soberanía alimentaria.

En efecto, desde 1979, cuando la Asamblea General de la OEA aprobó la Resolución 426 en apoyo a la demanda boliviana, declarando de interés hemisférico permanente la reintegración marítima boliviana al océano Pacífico e instando a ambos países a encontrar soluciones viables, 11 veces se ha pronunciado el organismo sobre la causa marítima boliviana y en todas las demás asambleas los representantes del país informaron al cónclave sobre el estado del reclamo a Chile. Este año no será la excepción.

Al respecto, el Canciller de Chile anunció días atrás, como un logro de su gobierno, que la Asamblea General no emitirá una nueva resolución, cuando en realidad, según ha explicado el Canciller boliviano, no se espera que esto ocurra, pues en entrevista con este diario señaló que “no habrá una Resolución más completa y justa” que la de 1979, y que en todo caso el tema está agendado para la sesión del martes 5.

El segundo asunto de interés para Bolivia, y que es el tema central de la reunión, la seguridad alimentaria con soberanía, fue propuesto meses atrás por la representación del país ante el organismo en Washington, EEUU, mereciendo una auspiciosa acogida, que se vio reflejada en las conclusiones de la reunión Modelo de Asamblea General realizada la semana pasada.

La propuesta boliviana en materia de soberanía alimentaria se basa en tres ejes, que para algunos países, EEUU principalmente, resultan polémicos: la no privatización del acceso al agua, la nacionalización de la tierra ociosa y que la propiedad de ésta no se concentre en grupos minoritarios. Según el embajador boliviano ante la OEA, el tema fue discutido ampliamente con anterioridad y se espera lograr el consenso en la cita de Tiquipaya.

Por su parte, dirigentes de oposición y grupos indígenas que se oponen a la construcción de la carretera San Ignacio-Villa Tunari, han logrado audiencias con el Secretario General de la OEA, actitud que fue calificada por el Vicepresidente del Estado como una “afrenta” al país, pues se pretende incluir temas de interés doméstico en un escenario continental, lo cual, con todo, era previsible.

Es previsible también que la Asamblea General sea tan exitosa como sus organizadores esperan que sea, lo que no significa ausencia de enormes riesgos políticos durante los tres días que sesionará. De la habilidad de los participantes dependerá, pues, el apoyo a la demanda marítima y a la propuesta sobre seguridad alimentaria.

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