The Uncomfortable Edward Snowden

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Cuando oigo o leo sobre el lío del ex agente de la CIA Edward Snowden, recuerdo el film de Tom Hanks “La Terminal”, solo que invertido, pues Snowden en la vida real está en el aeropuerto de Moscú y en el film Hanks pasa su aventura en un aeropuerto de Nueva York; Hanks trabaja, hace amigos, tiene novia y finalmente las circunstancias que le retenían en la terminal cesan, entra a la ciudad y al país.

Pero Snowden está en un verdadero lío. Cayó en un error tremendo al escoger Rusia para vararse; no calculó ni planificó que desde Moscú hasta América hay 11 o más horas de vuelo y que no hay avión en la tierra capaz de hacer ese vuelo sin reabastecerse de combustible.

Creo que los gobernantes americanos que han ofrecido asilo a Snowden saben estas circunstancias e inconvenientes técnicos, y que lo hicieron solo como “show off.” Rusia no va a molestar a Estados Unidos cediéndole a Snowden facilidades para viajar a América pues es problema del país que asile. La Paz, Caracas o Managua quizá le darían asilo, si el desafortunado estuviera en un país cuya distancia y horas de vuelo puedan hacerse sin inconvenientes. Las advertencias en sanciones de Estados Unidos no debe perderse de vista. En Nicaragua el COSEP ya lloró.

El estadounidense lleva casi un mes así. Moscú debe darle desde papel higiénico, cuchillas de afeitar, alimentación, “alistado” de ropa, cama, todo lo que un ser humano necesita para vacaciones indefinidas inesperadas.

Eso no es lo peor, sino el lío diplomático que Snowden ha provocado a Rusia y a Estados Unidos. Consciente de ello, el Presidente Putin ha advertido al aún pasajero que si les pide asilo se lo concederían a condición de que, una vez residiendo en Moscú, cesen sus denuncias informáticas contra Estados Unidos. Supuestamente la guerra fría ya finalizó. Su denuncia de espionaje estadounidense a países americanos aliados ha provocado líos diplomáticos, pues este espionaje lesiona los derechos políticos de todos esos gobiernos; queda demostrado que los Estados Unidos no tienen amigos, sino intereses.

Estados Unidos ha perdido este round por haber sido denunciado de espionaje y me pregunto qué habría sucedido si un agente de la KGB denunciase a Moscú de espiar a Washington. Entonces supuestamente volvería la guerra fría.

Alguna salida deberá haber para el incómodo y atrapado Snowden. Antes era el intercambio de espías y seguramente no se descarta, pero Washington debe capturar al espía de Moscú, si lo hay en Estados Unidos. Yo creía que La Habana le ofrecería asilo, pues Snowden sabe tanto a favor de países adversarios de Estados Unidos y en contra de estos, pero los actuales son otros tiempos La Habana-Washington.

Atrapado, sin pasaporte, sin nacionalidad, pues Washington le retiró su ciudadanía, Snowden sabe qué le espera si se expone y su talento debe decirle que olvide asilarse en América. Supuestamente sin recursos, sin hablar el idioma, sin su familia aun, quizá Snowden esté pensando aceptar ropa de invierno ante el inminente e implacable frío moscovita. En la vida todo debe planificarse, hasta la osadía. Si se queda en Moscú, su nombre será olvidado, pero quizá un día lo oiremos de nuevo.

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