Oil and Budget

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Los precios internacionales del petróleo han experimentado una tendencia sostenida a la baja desde el mes de junio. Dos indicadores inquietan al Ecuador y podrían impactar en el Erario Nacional. El West Texas Intermediate -que es el crudo marcador para nuestro país-, después de estar a más de USD 102 por barril, ha caído a principios de septiembre a USD 93. El Crudo Oriente se paga hoy a 87,9 mientras en junio alcanzó los USD 105. Ambos componen la oferta ecuatoriana de 550 000 barriles diarios. Se debe añadir el castigo para el crudo nacional por la calidad, que pese a que en los últimos años no se estimó en un rango elevado, actualmente bordea los USD 10 por cada barril de petróleo exportado. Para esta variación de precios convergen varios factores. La temporada veraniega en el Hemisferio Norte, que baja los niveles de consumo de combustibles; la expectativa por las reservas y explotación del petróleo de esquisto en Estados Unidos (‘fracking’ petrolero), y el mantenimiento de los niveles de extracción de Irán y los países árabes. Ciertamente lo que ocurra en Siria e Iraq podría mover el tablero de precios, sobre todo por el bombardeo estadounidense a los pozos controlados por el Estado Islámico, que sigue comercializando el crudo de las áreas tomadas. Normalmente los conflictos empujan el precio hacia arriba. En el caso ecuatoriano, la determinación del precio del crudo es clave para el financiamiento del Presupuesto General para el 2015.

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