Separatist Movements

<--

Una de las fortalezas más grandes de los Estados Unidos de América fue su propósito de unir a su país, estados y territorios que bordeaban las 13 naciones originales que se conformaron en el noreste de ese país. Bajo la filosofía del “destino manifiesto” ensancharon su territorio, obteniendo la unión de muchos estados y tierras pertenecientes a otras naciones. De esa manera le arrebataron a México la mitad de su territorio. Su propósito era no solo la Costa Atlántica, el Golfo de México y el Océano Pacífico, sino que extender su poderío y ambición territorial a países de ultramar.

De esa expansión territorial nace la nación más poderosa de la tierra, pues llevaba como denominador común su filosofía democrática, el nacimiento del capitalismo conformado por sus tres puntas de lanza: el respeto a la Constitución y sus leyes, la libertad del hombre y la propiedad privada. Aunque el origen de esa nación es criticable desde el punto de vista de su expansión, los pueblos encerrados dentro de sus fronteras celebraron con júbilo el haberse unido a una nación rica, poderosa y llena de prosperidad.

La Unión Soviética con el nacimiento del socialismo-comunismo se apoderó de las repúblicas vecinas, especialmente después de la Segunda Guerra Mundial, formando la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, bajo el dictum del comunismo, sosteniendo que su filosofía política y social que amalgamaba esa nueva gran nación, duraría más que el cristianismo. Desgraciadamente, la falta de democracia y libertad del hombre y la ausencia del derecho a la propiedad, hizo que esa nación se desbaratara, y ahora el señor Putin, presidente de ese país y guardián de la filosofía anterior, desea nuevamente conformar la nación poderosa que la Unión Soviética fue.

En la gran nación canadiense y desde 1959 surgió un movimiento separatista en la provincia de Quebec de habla francesa, que no aguantó más a su gobierno provincial conservador y teocrático, y en elecciones libres cambió su brújula, naciendo de allí el Partido Separatista de Quebec, que deseaba la independencia de la provincia para quitarse el peso del dominio inglés que existe en el resto de las otras nueve provincias. En un referéndum en las postrimerías del Siglo XX, los separatistas estuvieron a punto de obtener su objetivo, pero por el uno por ciento del electorado, perdieron esa gran oportunidad. Sin embargo, los partidos de tendencia independista gobernaron la provincia con decisiones tan radicales que hartaron al pueblo, y en las elecciones generales de este año, el Partido Separatista perdió con el 75 por ciento de la votación.

En el mes de noviembre de este año, el pueblo catalán de la Madre Patria, desea independizarse del reino español, a través de un referéndum ilegal que no es aprobado por la Constitución española, y aspiran a que Barcelona sea la capital de la nueva república de Cataluña, situación deplorable que debilitaría a la España de hoy y haría de Cataluña un minúsculo país dentro de la Eurozona. No obstante, se dice que la voz de los pueblos está sobre el peso de la ley, pero todos añoramos que los catalanes sigan dentro del reino español.

Escocia que se unió a Inglaterra en el año de 1707, votó antier por una separación del Reino Unido de la Gran Bretaña, en un referéndum que sí es legal y que de acuerdo a las encuestas de boca de urna, el 54 por ciento de la población está diciendo NO a la separación. Escocia es tan importante para la Gran Bretaña, como lo es California, Texas o New York para los Estados Unidos. El voto final lo sabremos este sábado, y esperamos que triunfe el NO para beneficio de ese gran país.

A pesar de la sabiduría de José Cecilio del Valle y de la fuerza militar de Morazán que quisieron mantener unida a Centroamérica, esta se desgranó en cinco pequeños y pobres países, pues nuestros antepasados no entendieron que una casa dividida usualmente fracasa. En este mes de la Patria los cinco países celebran su independencia de la Madre Patria, pero deberíamos empezar a cobijar en nuestros pensamientos la idea que Centroamérica dividida vale muy poco, pero que el Istmo Centroamericano unido, puede salir de la pobreza y la miseria y convertirse en una nación con democracia, libertad y trabajo fructífero para llenar las necesidades de los más de 39 millones de habitantes que somos vida, fuerza y espíritu para salir adelante.