The Cover and The Proverb

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TRUMP firmó la orden ejecutiva que impide la separación de niños y padres que cruzan la frontera recluidos en centros de detención. La portada de la Revista Time, un montaje fotográfico sobre un fondo rojo con la frase lapidaria “Bienvenida a América” (“Welcome to America”), ha sido el símbolo de este drama que recorrió el mundo entero. La niña muerta en llanto, frente a la imponente figura del hombre más poderoso de la tierra, es una hondureñita. La criatura de dos años de edad, fue fotografiada por el reportero gráfico (de Getty Images) ganador del premio Pulitzer, cuando lloraba desconsolada mirando con desgarradora ansiedad al agente inmigratorio norteamericano mientras requisa a su madre. El galardonado fotógrafo narra a la cadena BBC el momento sobrecogedor:

“Me hubiera gustado hablar más tiempo con ella, pero no pude”. “Me contó que habían llegado desde Honduras y que llevaba viajando un mes entero con su hija de dos años”. “La mujer tendría unos 30 años de edad y llevaba a su hija en brazos”. “Los agentes de la Patrulla le pidieron que la dejara en el suelo para proceder a su identificación y cachearla, y la niña rompió a llorar”. “La foto la tomé casi a medianoche, cuando llevaba ya desde las tres de la tarde con la patrulla”. “Ya había visto cómo se perseguía a inmigrantes con perros y helicópteros a través de los campos de cañas”. “Había visto muchas cosas”. “Tuve que parar y respirar un poco por la emoción”. “Soy periodista y padre, tengo dos hijas y un niño de solo 3 años. Sé que la ansiedad por la separación es común en niños de esa edad”. “Este caso me hizo ver esa situación llevada al extremo”. El complemento a lo anterior es el relato del papá de la emblemática niña hondureña que vive en Puerto Cortés. LA TRIBUNA ilustra con fotos conmovedoras el emotivo instante que el padre de la pequeña inmigrante Yanela Denisse Varela Sánchez ofrece su testimonio: “Ver la foto de mi hija en la Revista Time –expresó con lágrimas en los ojos– me partió el alma, me rompió el corazón, porque ella está pasando por una situación bien difícil allá en Estados Unidos”. Cuenta que su esposa Sandra María siempre tuvo la intención de perseguir su sueño: “Ella me había comentado que tenía planes de irse, pero le advertí que pensara bien las cosas y que no pusiera en riesgo a mi hija porque la situación en ese trayecto era peligrosa y más si iba con una bebé”. “Se enteró que ambas estaban bajo la autoridad estadounidense el pasado jueves, porque unos familiares que viven allá le enviaron a las 6:30 de la mañana un reportaje de Univisión en el que salía su niña”.

Declara que si bien él tiene un puesto en la Portuaria que les permite vivir con dignidad, respeta la decisión de su esposa Sandra de irse con la niña en busca de un mejor futuro. “Me parte el alma tener lejos a mi hija y de esa forma. Nadie tiene las fuerzas ni para sostener las lágrimas y peor al ver la imagen de mi niña. Eso me conmovió, pero tenemos fe de que todo saldrá bien”. Agrega que, “todavía no he tenido la oportunidad de hablar por teléfono con ellas” y que tampoco sabe con cuánto de dinero se fue. “Lo único que sé es que se fue con un ‘coyote’. Ella aquí no trabajaba, porque era ama de casa y se dedicaba a cuidar a nuestros cuatro hijos”. “A mí me duele mucho tener que estar lejos de mi consentida”. Nuevamente, esa tapa de Time, valida el proverbio chino que “una imagen vale más que mil palabras”. (Debe aclararse que la foto fue un arreglo ya que las autoridades confirman que la niña nunca fue separada de su madre).