Duque Visits Trump

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Pilas: Duque visita a Trump

Aterricen: una charla con el arrogante Trump, si lo contradicen, puede terminar mal.

Menos mal que Duque tiene una estatura igual a la de Trump y no se asustará si el gringo le alza la voz. Preguntas muy humanas que asaltan al presidente Iván Duque: ¿le pregunto a Trump por su esposa y los nietos? ¿Qué corbata uso para esa cita? ¿Será que me pongo bufanda para defenderme del frío que hace en Washington? No, no, presidente Duque, la bufanda que le vimos usar en Davos (Suiza) hace 12 días, esa Burberry de cuadritos rosados, algo pereirana, no le queda bien, es muy vistosa, no la use; el embajador Pacho Santos, si la regala, se la acepta dichoso, pues es ideal para el invierno gringo.

No es una cita cualquiera la del presidente Duque, es con el superduro Trump, el que barrió con votos a la intellectualité gringa, a la prensa progresista antifascista, a Hillary, la ‘mama grande’ del clan Clinton, y a los Kennedy y los Cabot Lodge, y el periodismo gringo, que lo insulta cada día porque da motivos.

A Iván Duque no lo esperan en el despacho de Trump para darle una condecoración, nada de eso, Trump & cía. quieren que nunca más haya sembrados de coca en Colombia, y es un imposible, es como pedirle que llene de agua al tope el raquítico río Cauca en dos días. Punto.

Debe darle un ligero susto a Iván Duque saber que tendrá una charla sobre política internacional, sobre los acuerdos de paz con las Farc y sobre cultivos de cocaína con el impredecible Donald Trump, que, según The New York Times y mil psiquiatras gringos, padece desequilibrios, algo de locura y sufre explosiones de ira. “Si ese señor se pone bravo… huyyyyy”, expresó asustada mi Lulita Arango-esposa.

Aterricen: una charla con el arrogante Trump, si lo contradicen, puede terminar mal, y que él le diga a nuestro Iván: ‘No soporto su terquedad, presidente Duque, le pido retirarse ya mismo de esta oficina, usted no está combatiendo la droga en Colombia como mi gobierno espera. Favor salir, y no le quito más tiempo’. No es ciencia ficción, eso puede ocurrir. Las iras de Trump son frecuentes. Punto.

Hay tres hechos que ustedes deben seguir: la represa que sabemos, la cita de Trump, Duque en Washington y la magia de la futbolera Champions League, porque Ronaldo, Messi, Falcao y Duván Zapata, con sus goles, mejoran este loco mundo. Buenas, buenas.

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