Failed Threat by US against Cuba

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Juan González, colombiano de nacimiento y estadounidense de corazón, quien se desempeña como asesor de Joe Biden para Latinoamérica, lanzó una lánguida amenaza contra Cuba.

Juan aseguró que vendrían sanciones contra dirigentes de la Isla si algunas de las fichas de Washington en La Habana eran arrestadas o procesadas judicialmente.

El flamante asesor argumentó su retórica con el recurrente artificio del respeto a los derechos fundamentales de los «protestantes pacíficos», obviando como siempre el marco legal establecido en la Isla.

Lo sugerente de la preocupación del colombo-estadounidense radica en su selectiva devoción a la hora de defender derechos. En abril pasado, Juan visitó su tierra natal, Colombia, justamente cuando allí bullía una nueva ola de protestas que superó las acaecidas en el 2019 y el 2020.

Tras reunirse con el presidente Duque y parte de su equipo, refirmó que «Colombia y Estados Unidos son aliados estratégicos».

Después vino lo que sabemos. Desde el 28 de abril hasta casi unas semanas atrás, centenares de miles de colombianos tomaron las calles de casi todo el país para expresar su inconformidad con el gobierno uribista de Duque.

El saldo fue de 80 muertos, decenas de heridos y desaparecidos, y centenares de detenidos. Frente a esta masiva masacre, que se une a las decenas de asesinatos durante las protestas de 2019 y 2020, y a las víctimas de la violencia enquistada en ese país, Juan no lanzó amenazas, ni siquiera preocupaciones.

En mayo, cuando la canciller y vicepresidenta colombiana viajó desesperada a Washington para lavar la cara del régimen uribista frente a una represión visiblemente desbordada, Juan la tranquilizó reiterándole su respaldo sin mencionar sanciones.

Esta selectiva manera de defender los derechos humanos evidencia, una vez más, el cinismo que transpira la administración de Biden y refuerza el criterio sobre la solidez facial que deben tener los funcionarios estadounidenses a la hora de hablar sobre Cuba. Por la borda se irá otra vez esta amenaza fallida por vacua e inmoral.