The Rise of the Black Republican?

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Los republicanos lograron avances entre latinos y hombres negros durante la era Trump, y ese impulso se refleja en candidatos afroestadounidenses

WASHINGTON. A la sombra del expresidente Donald Trump y el gobernador de Florida, Ron DeSantis, el senador conservador afroestadounidense Tim Scott presentó el lunes su candidatura a la nominación presidencial republicana.

Históricamente no es el primer afroestadounidense en buscar tal nominación, y su probable suerte no será mejor que la de sus predecesores. Pero su presencia es una señal de que a pesar de todos los pesares –y tal vez incluso de ellos mismos– los republicanos pueden presentarse como opción para las minorías.

El anuncio de Scott, de Carolina del Sur, fue precedido por la victoria de otro afroestadounidense, Daniel Cameron, que consiguió la nominación para la gubernatura de Kentucky.

Sería fácil, pero erróneo, restarle importancia a lo que algunos medios políticos estadounidenses definen como “el ascenso del republicano negro”.

De acuerdo con un análisis del grupo Axios, “una de las dinámicas que más se pasa por alto en nuestra política es que los votantes están cada vez menos polarizados por raza, incluso cuando están más divididos en líneas educativas”.

Bajo ese punto de vista, los republicanos lograron avances pequeños, pero notables, tanto entre latinos como entre hombres negros durante la era Trump, y ese impulso se refleja en un número creciente de candidatos afroestadounidenses.

Casi sorpresivamente, los republicanos eligieron a cinco miembros negros del Congreso, todos de estados y distritos electorales mayoritariamente blancos.

Por su parte, cinco nuevos diputados casi duplicaron el número de latinos republicanos en el Congreso, como señal también de su atractivo para hispanos conservadores. Se notó en especial el arribo de dos méxico-estadounidenses conservadoras, Anna Paulina Luna (Florida) y Mónica de la Cruz (Texas).

Mención aparte merece el tema del brasileño-estadounidense George Santos, electo en Nueva York y actualmente en problemas por mentiras y gastos ilegales.

Pero el mayor ascendiente republicano entre minorías étnicas es señal de que la creciente incorporación de esos grupos a las corrientes principales de la sociedad estadounidense es un proceso en desarrollo. Pero por primera vez, hay cinco republicanos negros en la Cámara baja, donde no había ninguno. Los demócratas tienen tantos como 60 legisladores negros y tres senadores.

Es en parte una paradoja, un gran porcentaje de latinos y afroestadounidenses se identifica como conservador, pero mantienen su lealtad al Partido Demócrata como reacción a los tonos racistas en la retórica de los republicanos.

Scott dice ser “prueba viviente de que Estados Unidos es la tierra de las oportunidades y no la tierra de la opresión”. Pero hasta no hace mucho, los republicanos negros eran desdeñosamente comparados con el Tío Tom, el protagonista de la novela de ese nombre y muy servicial a los blancos.

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