Images of Terror

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Mirando en forma directa a la cámara, y de manera temeraria se dirige al presidente estadounidense: “Estoy de vuelta, Obama, y estoy de vuelta a causa de tu arrogante política internacional contra el Estado Islámico (…). Mientras continúes atacando a nuestra gente, nuestros cuchillos seguirán cortando el cuello de tu gente”.Escalofriantes palabras e imágenes han conmocionado al mundo, dejaron ver la barbarie de los yihadistas, que pretenden reflejar una estructura muy compleja y bien organizada de extremistas islámicos, que no se tocan el alma para actuar. Aun ante los ruegos de una madre que suplicaba piedad a través de un video, para que no mataran a su cautivo hijo. La amenaza no es solamente para EE. UU., sino para cualquiera que se oponga a su regimen.

Estos extremistas ya han decapitado a niños cristianos en Irak, están violando y asesinando a las madres de los menores, y a sus padres los están colgando y degollando en las plazas públicas. Su objetivo es atacar a todas las minorías y sembrar terror.

Además de todo este terrible panorama, fue impactante ver los videos que se difundieron sobre las brutales decapitaciones de dos periodistas estadounidenses; se mostraba a los rehenes rapados, angustiados y vestidos con uniforme naranja de cautivos, en un fondo árido y paisaje desértico, siendo obligados a leer un mensaje de odio.

Los equipos de inteligencia y expertos no se hicieron esperar para empezar a ver más allá de lo que se ve, analizar las imágenes en base a la silueta del terrorista, movimientos, voz, fondo escénico y otros aspectos, que sirvieron como indicios para identificar al verdugo.

¿Fue el mismo hombre quien decapitó a ambos periodistas? Basados en detalles de simple observación, como el hecho de que ambos sostienen la daga con la mano izquierda. La voz suena con acento británico del sur de Londres. Los expertos aseguran que los patrones de voz y habla sonaban “idénticos” en ambos videos.

La figura y estatura del verdugo parecen ser iguales en ambos casos, un hombre delgado y vestido completamente de negro, apenas dejando ver los ojos, aunque escondido tras una capucha, dejaba ver un entrecejo fruncido que denotaba ira, odio y molestia. Al final se concluyó que se trata del mismo terrorista del ISIS, que ejecutó a James Foley y Steven Sotloff. Este hombre se hace llamar John, un joven de 24 años, de clase media y exrapero en Londres.

El periódico inglés The Guardian describe al verdugo, según testigos: “Como un hombre inteligente, educado y un devoto creyente de las enseñanzas islámicas radicales”.

Gracias a la tecnología biométrica digital de reconocimiento facial, de la voz y del iris, se captó la identidad de “John” como el supuesto responsable de ambos asesinatos. En la última cinta amenaza con matar a otro cautivo, un voluntario humanitario británico.

Ante estos hechos, Barack Obama afirmó que su país no se dejará intimidar, pero esto no compete solamente a EE. UU., sino a todas las naciones; no se debe permitir que estos actos brutales continúen, y debe exigirse que los responsables comparezcan ante la justicia.