9/11: America is Already TakingExtraordinary Measures

<--

EE.UU. ya extrema la vigilancia para el 11 de Septiembre

Aumentaron los controles en la Zona Cero, los aeropuertos y las redes de transporte

Por Silvia Pisani | LA NACION

Obreros ponen una red de seguridad en la catedral de Washington. Foto: EFE

WASHINGTON.- No importa que haga frío o calor. Todos los días, una hilera de turistas espera turno para la visita guiada que recorre el perímetro de Ground Zero, el área neoyorquina de 65.000 metros cuadrados arrasada el 11 de septiembre de 2001, cuando dos aviones se estrellaron contra las Torres Gemelas y 2752 personas murieron en un gigantesco ataque suicida.

Lo que esa peregrinación ignora es que, desde hace días y conforme se acerca el décimo aniversario de ese golpe terrorista, su paso por el inmenso pozo donde aún trabajan grúas y obreros, es vigilado mucho más atentamente, como parte del incremento en medidas de seguridad que se ha puesto en marcha.

Ground Zero no es el único punto. Aeropuertos, pasos fronterizos, eventos deportivos y redes de transporte han sido objeto de un aumento en los controles de seguridad, según confirmaron las autoridades y pueden comprobar, ya, numerosas personas en las principales ciudades del país, incluida esta capital.

“No es que hayamos sido informados de una amenaza concreta, pero se trata de una fecha muy especial y todos estamos atentos”, dijo Sean Duggan, de la policía estatal de Arizona, en la frontera con México.

Estados Unidos desbarató varios planes de ataque desde aquel día que, en 2001, les costó la vida a casi 3000 personas. “Hoy nos preocupa lo que puede hacer un lobo solitario”, señaló, semanas atrás, el presidente Barack Obama al hablar de la diferente gama de desafíos que el país enfrenta en materia de seguridad.

Se refirió así al riesgo que puede entrañar la acción de una organización identificada como Al-Qaeda, o como el que puede desprenderse de células aisladas o, también, de individuos que actúen de manera autónoma.

Alentado por la proximidad de la dolorosa fecha, el debate por la seguridad tuvo aristas impensadas. Entre ellas, la revelación de que, pese a los diez años transcurridos, los Estados Unidos no lograron poner en marcha nueve de las 41 recomendaciones sobre seguridad antiterrorista sugeridas por una comisión parlamentaria creada después de los ataques.

“Es verdad que todavía hay algunas de esas medidas pendientes de aplicación, pero lo concreto es que la cantidad que sí están operativas es enorme y que estamos centrados en la batalla contra la red Al-Qaeda y los terroristas que amenazan a los Estados Unidos”, afirmó el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney.

Integrada por representantes de ambos partidos, dos de sus ex directivos -el republicano Thomas Kean y el demócrata Lee Hamilton- señalaron que aún está pendiente la aplicación de sistemas biométricos para identificar a los extranjeros que cruzan la frontera norteamericana, así como una verdadera “coordinación” y “estandarización” de esos controles en los diferentes accesos.

El día del aniversario habrá un acto oficial con familiares de las víctimas y, un día después, a partir del 12, quedará abierto un nuevo espacio evocativo, cuyo acceso será gratuito, pero que demandará reserva de entradas. Se prevé que varios millones de personas lo visiten este año.

La seguridad, en tanto, avanza por vericuetos impensados. Entre ellos, la industria editorial, donde se libra una batalla entre un ex agente del FBI que trabajó durante años en la persecución de Al-Qaeda y la CIA.

Ocurre que el ex agente Ali Soufan escribió un libro sobre sus años de espionaje y la CIA pretende que censure largos párrafos del texto.

About this publication